PRC BU 45 Senda del mirador del Salto del Nervión

El sendero PR-BU 45 es un atractivo y cómodo itinerario para hacer a pie que comunica los principales hitos y equipamientos de uso público del Monumento Natural de Monte Santiago, conduciendo al senderista finalmente al mirador del Salto del Nervión, sin duda, el enclave más emblemático y popular de este espacio protegido. Esta ruta articula toda la red de senderos del Monumento Natural, lo que significa que puede ser utilizada como enlace para hacer cualquiera de las demás sendas circulares señalizadas del espacio protegido.
La ruta se inicia en el aparcamiento de Hoyalante, a la entrada del Monumento Natural. Todavía en sus primeros pasos, se desvía al norte por una vereda que discurre en paralelo al camino forestal de Fuente Santiago, atravesando brezales y zonas de pasto salpicadas de matas de espino albar, acebo y endrino, donde pastan vacas y yeguas en semilibertad.
En ligera subida, la ruta conduce rápidamente al lugar de La Entradilla, donde encontraremos un camino señalizado como PRC-BU 44 (Senda circular de los Usos Humanos) que se desvía al norte en dirección a Pozo Cortón. Nuestro itinerario continúa de frente, siempre en dirección este, hasta un segundo cruce cercano, donde el PRC-BU 43 (Senda circular del Bosque) se aparta esta vez hacia el sur en busca de los límites del Monte de Santiago, donde las hayas dan paso al encinal evidenciando un cambio brusco de condiciones ambientales.
Poco más adelante, nuestra senda se interna en el hayedo, ahora en ligero descenso, para ir a salir al aparcamiento de los Cipreses. Inmediatamente gira de nuevo al norte para proseguir por el interior de la umbrosa floresta hasta el aparcamiento de Fuente Santiago, enclave donde se localiza el centro de visitantes (la Casa del Parque) del Monumento Natural, parada obligada para documentarse sobre el espacio protegido.
En Fuente Santiago, histórico topónimo que hace referencia a la existencia de una surgencia en el karst sobre el que se asienta el hayal de Monte Santiago, la ruta continúa su periplo rectilíneo y decidido hacia el este, ahora por una pista forestal ancha y de buen firme, sin desnivel apreciable, prohibida para vehículos a motor (excepto usos autorizados) y compartida con las sendas PRC-BU 41 (Senda circular de los Miradores) y PRC-BU 42 (Senda circular del Karst). En el siguiente trayecto, descubre algunas formas kársticas relevantes, las denominadas calzadas de gigante, un tipo de lapiaz que parece cincelado por el ser humano más que debido a un proceso de erosión natural.
Dejando atrás un punto donde la Senda del Bosque (PRC-BU 43) se cruza de nuevo con nuestro trazado, la ruta alcanza el lugar de la Lobera de Santiago. En este enclave se daba caza al lobo mediante un ingenioso sistema de muros y empalizadas que confluían en un pozo ciego, donde el cánido perdía toda posibilidad de huida. Un conjunto de grandes esculturas recrean una escena que antaño se sucedía cada vez que se detectaba la presencia del cánido en el monte.
Pasada la lobera, la ruta abandona el hayedo y se asoma a una breve altiplanicie que conduce al mirador del Salto del Nervión, una plataforma colgada sobre el abismo que sobrevuela el vertiginoso cañón de Délika en el límite entre las provincias de Burgos y Álava. Allí termina la senda, al pie de la cárcava de flujo temporal por la que corre el joven Nervión hacia un salto de 220 m de caída vertical. Este espectáculo es visible tras días de lluvia, fuertes tormentas o nevadas ocasionales, cuando el karst de Monte Santiago desagua a través de numerosas surgencias que brotan de los acantilados dando lugar a un espectáculo inigualable.

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