Las Merindades

Las Merindades

Sensaciones por descubrir
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Burgos Origen y Destino
Tipo de ruta
  • De senderos De senderos
  • Dificultad Fácil Fácil
  • Recorrido Sólo IDA Sólo IDA
  • Distancia Distancia 0.81 km
  • Tiempo estimado Medio día 2 h
  • Señalizada No No
  • Desnivel de subida Desnivel de subida 37.00 m
  • Desnivel de bajada Desnivel de bajada 37.00 m
Descarga la ruta  Cómo llegar

El Baño de Bosque de Relloso de Losa, te propone vivir esta experiencia sumergiéndote de lleno en el sorprendente y casi desconocido por los/as visitantes, hayedo de esta localidad.
Año a año son muchas las personas que se acercan a Relloso de Losa para disfrutar de una jornada de senderismo atravesando el cercano túnel de la Complacera. El hayedo, por su parte situado a la izquierda del pueblo, queda más olvidado de las visitas, lo que convierte a este sorprendente entorno natural en el lugar idóneo para el disfrute de un baño de bosque por sus valores naturales y la tranquilidad que ofrece.
El hayedo de Relloso de Losa nos muestra sus diversas tonalidades a lo largo del año, la disposición horizontal de sus ramas ofrece una luz cambiante y el profuso musgo que surge por todos los rincones, configuran en este hayedo un lugar muy especial.

¿Comenzamos?
Una vez en el pueblo de Relloso, coge una senda que sale a la izquierda del mismo, te llevará hacia una amplia zona de pastos, mientras caminas, a tu derecha tendrás unas impresionantes vistas del valle, y en un recodo del camino tienes que salirte del mismo e internarte en la pradera.
Allí, entre rosales silvestres, puedes parar, y contemplar el paisaje a tu alrededor, si quieres, puedes cerrar los ojos y centrarte en los sonidos que hay a tu alrededor. Tal vez escuches algún ave surcando el cielo sobre ti, pequeños pájaros más cercanos, los cencerros de las vacas a lo lejos...disfruta de la ausencia de ruido antrópico en este rincón natural.
Puedes seguir caminando y poco a poco te adentrarás en un hayedo que te sorprenderá encontrar, ya que hasta ahora habías caminado entre praderas y valles amplios. Una vez dentro del bosque, puedes disfrutar sumergiendo tus manos en los mullidos musgos que tapizan las piedras. Con cuidado de no estropearlos, puedes notar la sensación de extrema suavidad que aportan. Y también, bajo las ramas de las hayas, puedes contemplar lo que en Japón denominan “Komorebi”, la luz tamizada entre las hojas. Para ello, el hayedo es un lugar muy adecuado, ya que sus ramas se disponen en pisos horizontales, y puedes disfrutar de su contemplación con las variedades de las estaciones, del verde intenso de la primavera al ocre del otoño; el hayedo es un espectáculo de colores.
Esas mismas hojas puedes observar en el suelo, tal vez quieras acercar tus manos a ellas y notar la tierra que esconden debajo, puedes notar su frescura, su temperatura, ser consciente de la cantidad de vida que alberga...y si te apetece, con los ojos cerrados, puedes oler esa tierra que tienes entre las manos. ¿Cuándo es la última vez que oliste la tierra? Al hacer esta sencilla acción, puedes estar obteniendo los beneficios que sobre el sistema inmunitario ofrece la bacteria “Mycobacterium vaccae “, presente en el suelo.

¿Te gustaría vivir la experiencia?
Podrás hacerlo a tu aire, siguiendo el track del recorrido que encontrarás a continuación, descargándote la App de autoguiado de rutas Línea Verde o a través de wikiloc en la cuenta Línea Verde.
O contacta si te gustaría disfrutar del paseo de Baño de Bosque de manera acompañada, puedes contactar con la Asociación de Baños de Bosque www.bañosdebosque.es

 

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